30.8.06

el último monstruo


tomó un puñado de arena y lo dejó escurrirse lentamente entre sus dedos.
había oscurecido y la arena estaba fría. por el silencio de la noche el oleaje se escuchaba poderoso, pero no lo era - eran olitas, con crestas de espuma blanca, una tras otra.

"¿crees que nos estén invadiendo?", preguntó.
un hilillo de arena aún caía desde su palma cerrada.
"¿invadiendo?", a veces comenzaba conversaciones así - sobre seres de otro mundo que vivían aquí, semejantes a nosotros, pero diferentes, multiplicándose, apoderándose lentamente del planeta.
eso - o seres de otra dimensión, de algún universo paralelo que vibraba un milisegundo más tarde y por lo tanto no se encontraba con el nuestro, ocupaban el mismo espacio, pero existían en tiempos distintos... hablaba de ese tipo de cosas.

nos habíamos besado la primera vez a principios del verano en la escalera del porche de su casa.
era una noche calurosa y llevaba un vestido abotonado adelante. caminamos desde el cine a su casa bajo un cielo repleto de estrellas, con las manos en los bolsillos y con una vida llena de futuro y promesas.

recuerdo que mientras nuestras bocas se unían y las lenguas mostraban cuán curiosas eran, se escuchaba el canto constante de los grillos. también en aquella ocasión el silencio nocturno hacía que otro ruido común nos pareciera más imponente que durante las horas del día.

esto es un aspecto singular de nuestra relación - recuerdo ruidos.
junto a la blancura de sus pechos y al sabor de su saliva, junto a las conversaciones sobre galaxias y viajes en el tiempo, recuerdo el sonido de las olas, el canto de los grillos, el goteo del paraguas, el filo del cuchillo rasgando la cáscara de la manzana, las tostadas crujiendo entre sus dientes.

los descubrimientos de ese verano pueden enumerarse en - el cuerpo de una mujer - el sexo - el amor - el espacio (y la posibilidad de estar siendo invadidos) y - los silencios (mejor dicho, los silencios con ruido, no sé si me explico bien).

el asunto es que le respondí que no sabía, que si lo estaban haciendo, lo estaban haciendo muy bien pues nadie se había dado cuenta.
"hay una película", dijo, "en que los extraterrestres pueden copiar nuestros cuerpos, después que han copiado a alguien lo queman con la vista. sus ojos lanzan unos rayos poderosísimos que reducen a la víctima a cenizas".
"la vi", dije, 'La Muerte Llega Desde El Cielo', así se llama...", mi mano se posó en su rodilla.
"Sí, esa!", dijo, "Esa misma".

desde alguna parte, la brisa nos traía una canción: "...put your hands on my shoulders...", pero después la brisa se calmaba y la canción desaparecía.

nunca he olvidado esa noche. el verano terminaba, pronto todos volveríamos a nuestras ciudades y colegios, a nuestras vidas.
el mundo nos esperaba impaciente y el verano había sido sólo una burbuja de tiempo, un regalo de esos que apreciamos solamente cuando nos percatamos que ya no los recibiremos nunca más.

de regreso a su casa pasamos por el cine cerrado - cine del pueblo, uno solo, de esos que funcionaban en matiné, vermút y noche y que los domingos en la mañana daban especiales de Tom y Jerry para los niños. esos con lobby, columnas y cortinas rojas.

ella se había puesto mi chaqueta de mezclilla (fue la primera vez en que le ofrecí caballerosamente mi chaqueta a una mujer) y se acurrucó entre mis brazos mientras pasamos ante las puertas cerradas del cine y los letreros apagados.
y otro ruido para el recuerdo - el de nuestras pisadas.

el teatro callado y oscuro, los carteles que mostraban a Steve McQueen y Aneta Corsaut escapando del monstruo rosado que había llegado a la Tierra en un meteorito, el calor de su cuerpo pegado al mío y nuestras pisadas, el eco en las marquesinas, el eco que se perdía en la noche.

en el porche me devolvió la chaqueta y nos besamos con ansias, casi con desesperación - el verano se iba y sabíamos que nunca más habría veranos así.
y nunca más los hubo.

caminé solo de vuelta a mi casa, todavía con el sabor de su boca, silbando "... put your hands on my shoulders ... hold me in your arms ... baby!".

esos veranos se fueron como si hubieran sido un sueño, como si realmente una silenciosa invasión de monstruos espaciales nos hubiera robado el pasado, abandonándonos después, en un planeta frío y desconocido llamado 'vida adulta'.

sólo nos quedan algunas cosas conocidas... el ruido de las olas, la lluvia golpeando el paraguas, los grillos, nuestras pisadas en la noche...

(collage - frank h. ,posteado originalmente el 11 de septiembre del 2005)

28.8.06

una terrible tempestad trituró el aire


una terrible tempestad trituró el aire
las nubes eran pocas y esqueléticas
una negrura - como la capa de un espectro
ocultó el cielo y la tierra

las criaturas en los techos rieron entre dientes
y silbaron en el aire
y apretaron sus puños
y afilaron sus dientes
y elevaron su pelo enloquecido

la mañana se abrió - los pájaros se elevaron
los palidos ojos de la bestia
regresaron poco a poco a su costa nativa
y hubo paz - y fue el paraíso!


- emily dickinson (1830-1886)

(imagen - frank h.)

25.8.06

disección


abrir perspectivas
con un cuchillo cartonero
como regalo de cumpleaños
desenredar malezas cotidianas
revivir colección de sonrisas deslavadas
("miren el pajarito!")
y bailar sin moverse
con música de olvidos

sacarse la ropa
vestir disfraces insospechados
y por tu espalda una pluma inquieta
una chispeante trascendencia
de cartas de amor
y de fotos quebradas

(ilustración - frank h.)

24.8.06

billar cósmico


¿habrá manera de llevarte esta presencia?
los años de anotaciones mentales
sobre lo que sería
cruzarse contigo en una calle repleta
entre extraños hablando lenguas muertas

¿habrá un método para trazar el mapa de tu vida?
las vías deshilachadas de tus manos
códigos métricos para tu risa
círculos rojos por cada uno de tus amantes

¿existirá la fórmula de la salvación?
una máquina gris de las trasmutaciones
alguna longitud de onda donde habiten tus pechos
una invensión que me impulse hiper-espacial
hasta el punto infalible de tus ojos

(collage - frank h.)

23.8.06

reflejos


formas que la lámpara capturó
como nunca antes:
ella - reflejo secreto
él - cazador de fulgores

el gato los admira
en esa curvatura de arenas cautivas
aún ahora - estación de volcanes muertos
después, se sienta en el balcón
a oler en la tarde
los huesos oxidados

la fosa común de la ciudad

(collage - frank h. - posteado originalmente el 20 de abril del 2006)

17.8.06

épocas de piel


no había nada que nos transara la vida
escuchábamos las sirenas de bombardeo
el oleaje azul
las bocinas de la ciudad
y respirábamos por la piel
no calendarios de escritorio
ni relojes a dólar made in china
nos manejaban las ganas

hubieron tiempos completos
noches de amanecida
bailando sirtaki
y bebiendo arak como locos
porque nadie nos firmaba un mañana

y cuando el concierto terminaba
andábamos nuestras calles
íbamos donde Issy a comprar guayabas
yo leía titulares
mientras tus manos palomas
volaban entre frutas

no hubieron tiempos mejores
- no hay tiempos mejores -
que los vividos como animales de bosque
entre cazadores
burlando las trampas de la oscuridad
triunfando minuto a minuto
sobre la muerte

(collage - frank h.)

14.8.06

¿es posible fotografiar el vacío?


John Travolta llamó después de almuerzo
invitándonos a ver unas películas italianas
en el cine del barrio
"hay una con Gloria Guida' dijo
le dijimos que viniera él
tarde de sábado - los papás del Pepe no estaban
teníamos el LP de Iron Butterfly y el de Rare Earth
estaba también la Paty y la Lita
sentadas en la cocina
habían trabajado en una cajetilla entera de Luckies
- los zepelines, blanca pirámide en un plato de loza

se nos hizo tarde imitando la batería de 'Get Ready'
(versión larga)
después
nos fuimos sin destino a las calles oscuras
comiéndonos el aire de ese otoño a paso rápido
en todas las fiestas cantaba Dona Summer
'fucking disco' dijo alguien sensible
el rock luchaba por sobrevivir
sin saberlo - éramos hermanos de destino
no fuimos a la película de Gloria Guida

de noche
nos sentamos en una plaza forrada en hojas
pasaban pocos autos
las luces de la calle eran respetuosas
fumábamos nerviosos el pito del futuro
el futuro
el futuro era algo así como un lejano maremoto
un lugar de desastres que ya estaría bien
para cuando llegáramos
'yo me casaré', dijo la Paty, nariz con mocos de frío
'voy a tener tres hijos y una casa con flores'
y le dió la última chupada al zepelín sujeto con las uñas

nos quedamos en silencio
porque todos soñábamos sueños distintos
yo con dunas y palmeras
con mirar el desierto desde arriba
ver la línea azul del Jordán como dibujada a lápiz
y con una mujer que aún no conocía

caminamos de regreso
en el vacío espejismo de lo desconocido
allá, las estrellas - la tómbola del universo
'apurémonos' dijo la Lita
'ya me meo'

nos apuramos

(collage - frank h.)

12.8.06

mitad de sol


se pone a la venta en eBay
una mitad de sol atrapada
rayos en buen estado
estanque de helio lleno
usada para madurar trigales
una mitad buena y tranquila

se aceptan cheques al portador - sillas pintadas de azul
promesas - Pay Pal - como quiera el comprador
no sujeto en absoluto
a leyes de oferta y demanda

(ilustración -frank h.)

11.8.06

solicitud a Xavier Cugat


si una bandada de notas
liberara la perspectiva familiar de esas calles viejas
cuatro sombras tranquilas de la noche
conversarían la caminata simple
entre cortinas bajas y faroles tenues
un futuro de almendros - que no llegó

(ilustración - frank h.)

10.8.06

cazadora


rincones de ciudad
flores salvajes
gatos durmiendo

caza cometas de vida
minisegundos del azar
y los momifica para siempre

diosa de templos digitales
no exige sacrificios en su nombre
sólo un nido abandonado
la luna en la ventana
el sol jugando al escondite
en el bosque

(collage - Frank)

9.8.06

"en la vida de un hombre"


en la vida de un hombre
el primer templo es destruído
y el segundo templo es destruído
pero él debe seguir con su vida
no como esos que se fueron al exilio
allá lejos
y no como Dios
el que simplemente se fue a lo alto

en la vida de un hombre
él resucita los muertos en un sueño
y en un segundo sueño los entierra

(collage - frank h., poema - Yehuda Amihai)

8.8.06

osadía


habré de tocar su frente
deshecha en oleaje
y un brazo extendido al abismo
celebra destellos de un primer invierno
desune lodo en tierra y agua
por encima multitud de cielos
los mares útero y el viento abeja
viaje sin escalas por tu vientre trigo
el paraguas del bosque inagotable
dibujará treguas en los ojos
será cómodo encontrar señales
en el monte Ararat
según los cándidos afanes de la magia
mientras sigan intentando desdoblar
las moléculas de alma
para separar al serumano en ser-humano
yo me abocaré
a la respuesta de tu lengua

(collage - frank h.)

5.8.06

verano vencido


hubo una vez un verano
de pelo seco
piel oscura
y silencios bajo el limonero

fue un verano
interminable
que duró todo un día
desde la mañana a la tarde
y que aguó cielos de noche
palabras quietas de porche

un verano con tigres de malasia
con manzanas doradas de sol
y el sermón de father mckenzie que nadie
nadie escuchó

hubo una vez un verano
que pareció durar para siempre
entre olas en las rocas
con good vibrations de wilson
el humo del primer cigarrillo
con el sol en la espalda
y los sueños ya en el camino


(collage - frank h.)

4.8.06

impasse


por favor, un momento de quietud
sentarme frente al mar con el diario,
unos croissonts y un café recién filtrado
mañana o tarde - pero paz, brisa clara
y gaviotas en el cielo

ver: un niño en triciclo, un gato que se lame con paciencia,
dos que pelean por el estacionamiento
una pareja de enamorados, una chica hermosa

una polaroid del mundo, un instante de vida
a lo lejos - la guerra - la otra cara del mundo
unos viviendo para matar
otros, muriendo para vivir

más acá - los que gritan que sí y los que gritan que no
los que lloran con un ojo
y ríen con el otro
los pulcros actores de este escenario
con las frases justas
para la ovación

"fuck them all"
sólo quiero
uno momento de sosiego,
sentarme frente al mar, con el diario y un café
sentir la brisa calma
recordar a mi padre
a los amigos idos
a los que murieron por vivir

repasar - sin sabores en la boca
sueños logrados
sueños que no
las mujeres amadas
sus risas y sus pieles
sus voces de neón

una polaroid del mundo
un momento de reposo
después
después ya se verá
cómo echar al mar este velero de huesos


(collage - frank h.)

3.8.06

respuesta elegante


El doctor enseñaba a una clase de primer año de medicina. La sala estaba llena de estudiantes tomando rápidas notas.

El doctor dijo: "El sémen de los mamíferos, incluído el hombre, posee una alta concentración de glucosa. Ésta entrega la energía necesaria para el intenso movimiento de los espermios después de la eyaculación..."

Una estudianta levantó tímidamente la mano y preguntó: "Doctor, la glucosa es un azúcar, no?"
"Sí" - afirmó el doctor.
"Entonces - dijo la estudiante - ¿por qué el sémen no es dulce?"

Primero se hizo un silencio - después estallaron las carcajadas en la sala. Sólo entonces la estudianta pareció captar lo que había preguntado y se sonrojó.

El profesor hizo callar a los estudiantes y respondió: "Es dulce, pero usted no lo nota porque las papilas gustativas para lo dulce están en la punta de la lengua, no al fondo".

Así que, ya lo saben.

(collage - Frank)