9.3.13

averiado

recuerdo que los Trammps cantaban "detén la noche" 
y nos sentíamos señores feudales de un trozo de aire en lo alto
mientras nos licuábamos en sueños

después vino Louis convenciéndonos que el mundo es maravilloso
y que bastaban las ganas 
que la guerra estaba ganada con el convencimiento del camino justo
y que podíamos confiar en las estrellas

después no vino nada

sólo imágenes de desesperación
en una búsqueda cada día más estéril, más difícil 
más de elefante que vaga 
quemando un poco de tiempo 
antes de encaminarse a su ausencia definitiva

3 comentarios:

Vanessa Alanís dijo...

lo que le hacen las nubes a un cielo estrellado...

unsologato dijo...

oh oh lo encantador de cierto nihilismo...

abrazoceánico con islas de esperanza

milo dijo...

powerful, beautiful piece!